Pinceladas Esther

Pinceladas Esther
La riqueza de cada casa está en la capacidad de sus habitantes y de dejarnos sorprender por la vida, cada situación requiere esfuerzo. Abrir cajar y armarios siempre remueve la historia compartida y prepara para lo que está por llegar.

domingo, 27 de marzo de 2016





El Dios de Jesús no es un Dios de muertos, es un Dios de vivos.

Los cristianos hemos de ser personas apasionadas por la vida, conscientes de que para encontrar la plenitud nos tocará vivir algunas noches oscuras en las que vivir los momentos será difícil pero confiados de que poco a poco la luz se abre camino y nos ilumina plenamente.

Como las mujeres que al llegar al sepulcro y descubrirlo vacío fueron las primeras en creer y correr a gritar al mundo: "Ha resucitado" Ellas que le habían acompañado en los momentos más dolorosos, en todo su camino hacia la cruz incluso a los pies de ella. Ellas le vieron morir.

Él lo era todo para ellas, él las había reconocido, considerado, ... amado, por Él lo harían todo, por eso, fueron aquella madrugada al sepulcro, para hacer algo más, contracorriente y asumiendo el riesgo que suponía.

Son muchas las veces en que lo único que podemos hacer es estar, acompañar, consolar,... esperando, confiando que existe un brote de amor y de misericordia que ha de brotar, abonemos el terreno, y anunciemos que la vida vence a la muerte.  Seamos testigos de la Resurrección para otros, seamos portadores de vida para todos.

"Hoy es un día grande, la vida ha vencido a la muerte"

¡¡¡Cristo ha resucitado!!! Ábrele tu vida y tu corazón y acercalo a tus hermanos.


FELIZ PASCUA A TODOS

viernes, 25 de marzo de 2016



Si hubiera estado allí, ... 

escuchemos la letra con detalle, ...
las imagenes son duras pero y ¿no lo fueron aquel día?, incluso más, aquel viernes yo no estaba allí, pero y si hubiera estado...
hoy estoy aquí y ¿qué hago?
miles de personas en campos de refugiados, en fronteras... 
cientos de personas en nuestras calles,..
vecinos sólos,...
enfermos en hospitales que nadie visita...

Si hubiera estado allí...

Vivamos este viernes santo pensando en ello.

lunes, 21 de marzo de 2016

PREGUNTAS EN JERUSALÉN

¿De qué valen los «Hossannah»
si te volvemos la espalda?
¿Para qué tanto alboroto,
si mañana callaremos,
o gritaremos el nombre,
del «Barrabás» de turno?
¿A dónde van las promesas
que se lleva el viento?
¿A quién sirve el pan
que se esconde
y no se reparte?
Y los aplausos de hoy,
¿en qué se convertirán,
si caes en desgracia?
¿Quién nos enseñará a amar,
si encerramos el corazón
en una jaula de piedra?
Tú, Señor, nos traerás
todas las respuestas
en el pan partido,
en el amor crucificado,
en el sepulcro vacío.
Es tiempo de contemplar,
y escuchar tu Palabra.

José Luis Rodriguez Olaizola sj


PREGUNTAS HOY Y AQUÍ

Ayer cuando leí estos versos me vinieron a la mente imágenes de aquella entrada en Jerusalén y acto seguido de tantas y tantas personas que viven verdaderas pasiones en nuestras fronteras, ante nuestro ojos y sin que podamos hacer mucho más que rezar y pensar en ellos.

Ayer durante la celebración de domingo de Ramos sentí la necesidad de que pasará pronto, de que por una vez nos miráramos unos a otros conscientes de lo que allí recordamos y revivimos, justo como dice el texto ¿de que vale? si, de que vale recordar esa entrada en Jerusalén si repetimos en nuestros días ese volver la espalda a quién nos necesita.

¿Qué hacer? ¿Qué hacer?

Entonces en Jerusalén, hoy aquí.... 


sábado, 19 de marzo de 2016

Por tus ojos buen José,
supo Jesús que Dios era bueno,
y por tus manos, que Dios sabe amar.
Por tus brazos aprendió
que el trabajo es también aventura,
y vocación, la libertad.

DE TU TERNURA, JOSÉ,
YO QUIERO APRENDER.
Y DE TU ARROYO DE PAZ
QUISIERA BEBER.
Y CAMINANDO TUS PASOS
DE FIDELIDAD,
CANTARLES A MIS HERMANOS
TU SUAVE HUMILDAD.

Mucho amaste a tu mujer,
y en tu amor había delicadeza,
y fortaleza de ti recibió.
En tus ojos Jesús vio
que el Dios de Israel era su Padre,
y en tus silencios, le escuchó.

Hoy es San José ese hombre que desde su discreción y saber estar acompañó y posibilitó la venida de Jesús al mundo. Sabemos poco de su vida pero fue carpintero y seguro que pudo compartir con su hijo ratos en el taller, mientras trabajaba con sus manos, creando muebles o cosas sencillas pero necesarias, seguro que en esos ratos pudo ir educando a su hijo y contagiándole valores y actitudes que después él pudo poner en practica.

Como tantos y tantos padres han hecho con sus hijos.

Recuerdo mucho y con inmensa gratitud como mi padre sabía estar con nosotras, compartir ratos y ratos, jugar, hablar, ... Gracias por todo lo que nos diste y por ser como eras, seguro que San José fue un buen modelo, por eso cantamos esta hermosa canción en tu funeral.

domingo, 13 de marzo de 2016




"Cuando la Iglesia se encierra, enferma. La Iglesia debe salir de sí misma. ¿Hacia dónde? Hacia las periferias existenciales, cualesquiera que sean, pero salir..." (Mayo 2013)







"Misericordia es el acto último y supremo con el cual Dios viene a nuestro encuentro. Misericordia es la ley fundamental que habita en el corazón de cada persona cuando mira con ojos sinceros al hermano que encuentra en el camino de la vida. Misericordia es la vía que une a Dios y al hombre porque abre el corazón a la esperanza de ser amados sin tener en cuenta el límite de nuestro pecado" .(Para Francisco, Bula del Jubileo de la Misericordia)

Ya hace 3 años que Jorge Bergoglio, Francisco, salió al balcón del Vaticano y con aquella sonrisa nos pidió que rezáramos por él.

Todos sus gestos y palabras nos llevan a una mayor profundidad y autenticidad como cristianos, recemos por él y por toda la humanidad que sepamos salir a las periferias existenciales y ser portadores de esperanza y Misericordia en cada lugar del mundo.

Vivamos con alegría nuestro ser cristianos en el mundo.

Gracias Francisco por tu testimonio.









sábado, 5 de marzo de 2016





“Sólo por tu amor, por tu amor únicamente, te perdonarán los pobres el pan que tú les das”.









Esta frase de San Vicente de Paul podemos encontrarla en muchas de las casas donde hay presencia de las hijas de la Caridad, durante algún tiempo la leía y no conseguía entenderla.

Afortunadamente pude formar parte de la Obra Social Santa Luisa de Marillac en la Barceloneta durante un tiempo, donde aún pude conocer a Sor Genoveva, ya mayor pero activa y entregada a lo más importante, a estar al lado de aquellos que no tienen a nadie.

Sor Genoveva vivía encarnando el amor de Dios, es decir concretando constantemente ese “amaos los unos a los otros como yo os he amado” en nuestro día a día.

Sor Genoveva hacía que cada persona se sintiera “hija predilecta” de Dios cuando se encontraba con ella, sus manos acariciaban a cada persona haciéndola sentir única en el momento, cuando te hablaba lo hacía consciente de que entrar en el otro es hacerlo en tierra sagrada y lo hacía con sumo respeto y cariño,... seguramente este gesto hacía que tantas personas le abrieran su corazón y su vida.

Junto a Sor Genoveva uno sentía la ternura de Dios actuando en uno mismo, siempre se acercaba a los que encontraba mientras se dirigía a su despacho y nos daba dos cariñosos besos, y siempre tenía una palabra adecuada para iniciar el día.

La navidad pasada el papa Francisco nos decía “Dejemos que nuestro corazón se conmueva, se enardezca con la ternura de Dios; necesitamos sus caricias. Las caricias de Dios no producen heridas, las caricias de Dios nos dan paz y fuerza, necesitamos las caricias de Dios.” 

Sor Genoveva se dejó conmover por la realidad que la envolvía, supo ver la grandeza de cada ser humano y supo ser la ternura de Dios para muchas personas, fue ungüento para muchas heridas, sus caricias sanaron mucha vida y posibilitaron muchas oportunidades para aquellas personas a las que la sociedad muchas veces ignora.

Sor Genoveva ha sido para muchos de los que hemos tenido la suerte de conocerla la concreción de una forma de estar y de acompañar, sabiendo poner en el centro a la persona con una amplia mirada de misericordia, viviendo en profundidad aquello que nos dice el Evangelio de Mateo: “cuanto hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicisteis”.


Al ver a sor Genoveva uno no puede dejar de entender aquel “Sólo por tu amor, por tu amor únicamente, te perdonarán los pobres el pan que tú les das” porque ella era ese amor encarnado y vivido en plenitud, dado a toda aquella persona a la que se acercara.

Esther Borrego Linares
Trabajadora Social, coordinadora Espai Vincles Rosalia Rendu
Articulo publicado el 26 de Julio 2015 en Catalunya Cristiana