Pinceladas Esther

Pinceladas Esther
La riqueza de cada casa está en la capacidad de sus habitantes y de dejarnos sorprender por la vida, cada situación requiere esfuerzo. Abrir cajar y armarios siempre remueve la historia compartida y prepara para lo que está por llegar.

lunes, 31 de diciembre de 2018


31 de diciembre



El 31 de diciembre es un día que siempre evoca sentimientos encontrados:






agradecimiento por lo mucho vivido, a la vez que cierta nostalgia por aquello que uno esperaba y no se dio, ...

alegría por lo compartido y por aquellos con quien lo compartimos, ... tristeza al pensar en los que ya no están, sea porque su vida fue tan plena que finalizó o porque la vida ha querido alejarlos de nosotros (esto entristece mucho también)

responsabilidad por aquello que uno llevo a cabo, si ha salido según lo esperado pero también si no ha sido así, esa responsabilidad que pesa en ciertos momentos motiva en otros muchos.

y en algunos momentos hay un sentimiento de esperar que no se acabe, que sigamos aquí en el 2018 con todo lo que hay, con lo que uno ya conoce y espera con más o menos certeza, porque ¡cuánto cuesta empezar de nuevo!

Aunque sea sólo un nuevo año, en el que podemos compartir de nuevo, conocer y reconocer personas que seguirán pasando por nuestro lado, y quizás sí llegó el momento de tomar ese café pendiente, reconociéndonos en el otro y con nuevas páginas a escribir.

Quizás esa es la oportunidad de este día 31 de diciembre, noche vieja, agradecer y esperar de todo aquello que somos y vivimos, abriéndonos a nuevas oportunidades.

¿Hacemos el ejercicio?



domingo, 30 de diciembre de 2018

Navidad, hoy

Sí, qué alegría nos produciría saber que supuso para el protagonista de hoy todo lo que sucedió, saber que fue para él nacer como nació, vivir como vivió y cómo todo aquello, igual que a cada uno de nosotros le hizo como era y le permitió vivir lo que vivió... Y si algún día pudiéramos saberlo...

Bueno he aquí un intento sencillo pero entrañable (privado y humilde)

os comparto este pequeño testimonio con gratitud por haber podido producido y confiando haya sido un detalle tierno de estos días y para otros.

viernes, 28 de diciembre de 2018

INOCENTES HOY

¿Quienes son hoy los inocentes?

En el mundo que vivimos con tanta y tanta información, tantos recursos, donde recorrer el mundo es mucho más sencillo que hablar en una comida familiar, ... donde sabemos en segundos qué está sucediendo a kilómetros de distancia....

Sí, en este mundo sigue habiendo inocentes, como los hubo en aquella época.

Quizás la pregunta que deberíamos hacernos hoy es ¿quienes son hoy nuestros santos inocentes? Aquellos que pierden la vida sin saber porqué, no hay causa más allá de la envidia, la codicia, el miedo, ... lo que cada uno tenemos en nuestro interior y nos da miedo mirar para afrontarlo y superarlo, eso provoca tanto dolor, tantos inocentes a nuestro alrededor, tan y tan cerca de cada uno.

Podemos poner fotos de personas que viven lejos, que viven situaciones radicales, marginales,... pero esta esa vecina a la que ni siquiera saludo, ese compañero de trabajo al que evito en mi descanso, ... están los que reciben mis malas practicas y son menospreciados por todos, ...

Y existen los que no conozco pero hoy no podrán estar cerca de los suyos, ni ofrecerles un gesto de ternura porque viven privados de libertad, despojados de todo lo que les corresponde por ser personas, ... aquellos que dormirán en la calle bajo el cielo, sin nada que les suavice el frío exterior e interior. Están aquellas personas que lo dieron todo por los suyos y hoy ya no hay nadie que les de un abrazo, .... Están..., están,...

Tantos inocentes anónimos, hoy también por ellos, tengamos un gesto de calidez humana, de aceptar, de ternura con alguien que nos encontremos, ojalá fuera nuestro hábito diario.


FELIZ NAVIDAD





Sí, felicitémonos un año más este bello día en que, creamos lo que creamos, o no creamos, podemos mirar a nuestro entorno confiados que veremos una pequeña luz en cada persona que tenemos cerca, la Navidad tiene eso.

Pero además puede tener, porque lo tuvo un día esa capacidad de transformar los corazones, para ver aquello que en otros momentos dejamos pasar, sin poner atención, aquella mirada tierna, aquella sonrisa que nos llena de luz, aquella estrella que hoy brilla más, ... 

Me gusta pensar, cada vez me cuesta más, que puede ser, que sí que cada día podemos ser algo más confiados, esperanzados, alimentar nuestros sueños, y quizás hasta caminar con ellos en el horizonte.

Quizás la Navidad sea esa parada que nos recuerda que nuestro corazón debe estar abierto a lo que vivimos, a lo que nos rodea,... y a todo aquello que en otros días no queremos mirar.

BON NADAL!!!